Julio César Ordóñez Fernández se despidió de su familia el pasado lunes 6 de junio, en el barrio San Felipe, y salió a tomar un bus para ir a su trabajo, en una clínica de rehabilitación en Salgar, donde trabaja en el área de Servicios Generales.

Cuando su esposa supuso que ya habría llegado a su trabajo, lo llamó al celular para preguntarle cómo le había ido. Julio contestó, pero le dijo que estaba pasando por un sitio que no era muy seguro y le pidió que hablaran más tarde. Fue la última vez que contestó su celular.

Desde entonces, su familia trata de encontrarlo porque al parecer ni siquiera llegó a su sitio de trabajo ese lunes y ya son dos días sin tener noticias de él.

Su hermana, Eva Ordóñez, manifiesta que en la casa están bastante preocupados porque algo así nunca había sucedido.

“Él no es tomador, él no es problemático, nunca había pasado esto, no es un hombre de ir a tomar, no es hombre de ir a rumbear. Él salió normal, se despidió de mi mamá de su esposa, de su hija, se fue a coger el bus en la esquina de la casa”, dice.

El último día que lo vieron,  vestía una camisa azul manga larga, un pantalón azul turquí y una franela roja. La familia espera que si a través de las redes sociales alguien lo identifica, se contacten al celular 3012112804 o al teléfono fijo 3656626.

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